Estuvimos en Úbeda en marzo de 2006. Nos habían sobrado algunos bonos de hotel del verano anterior y los gastamos en Cuenca (febrero) y en Jaén (Úbeda y Cazorla). No hice muchas fotos porque el cielo estaba cubierto y la cámara que llevaba, la Nikon D70, de noche no tiraba con calidad.
Úbeda, viernes 17 de marzo
A las 5 ya estábamos instalados en un discreto hotel, cuyo nombre no recuerdo. Para orientarnos, nos apuntamos a una visita guiada de Atlante; esa sinfonía de piedra y renacimiento que era Úbeda nos la tenían que explicar. Empezamos por la Capilla del Salvador; no se podían hacer fotos, y solo hice un par de ellas. Seguimos callejeando y entramos en el Museo de San Juan de la Cruz, que murió en Úbeda en 1591. También vimos la iglesia de San Pablo, las antiguas Casas Consistoriales, el Hospital de Santiago, Santa María de los Reales Alcázares… Al caer la noche, entramos en la alfarería de uno de los Tito y después disfrutamos un rato con la iluminación de la Plaza Vázquez de Molina.
Sábado, 18 de marzo
Úbeda
Antes de marcharnos, volvimos a recorrer los mismos lugares del día anterior, esta vez con mejores luces, aunque la mañanita se estaba poniendo fea.
Cazorla
Fue la segunda etapa de esta escapada. El sábado nos alojamos en la Villa Turística de Cazorla. En una venta comimos unas migas espectaculares y después nos acercamos al nacimiento del Guadalquivir. La tarde no estaba para excursiones, así que nos recogimos en el hotel al amor de la lumbre. El domingo amaneció mejor día, pero teníamos que volver a casa.
Otra vez en Úbeda, 25 y 26 de junio de 2009
Volví a Úbeda para participar en unas jornadas educativas en el Hospital de Santiago. Ya tenía mejor cámara (la D200) y al comienzo del verano los días eran espléndidos. Aproveché pues, entre ponencia y ponencia —y en los tiempos muertos— para salir a la ciudad y completar de alguna manera el reportaje que había iniciado tres años atrás. En las batidas del jueves descubrí el interior de San Isidoro, con el Cristo de la Columna y María Santísima de la Caridad, hice más fotos prohibidas en El Salvador y charlé con Juan Tito de sus parideras. En las del viernes, entré en el Museo Arqueológico —prohibidas las fotos— y al interior de San Pablo, donde se preparaba el paso de la Virgen de Guadalupe. También visité la iglesia y el patio del colegio de La Trinidad, y naturalmente, el Hospital de Santiago, donde se celebraban las jornadas.