Continué dando paseos por Córdoba en 2011. El nuevo Museo Arqueológico se inauguró el 31 de enero, y tuve la suerte de participar en una de las primeras visitas guiadas. Fue el 5 de febrero de la mano de Marian Domínguez, estupenda comunicadora que ya conocía de varias actividades escolares. El nuevo museo me sorprendió gratamente; habían valido la pena tantos años de espera hasta su apertura. La ampliación estaba construida sobre las ruinas de cimientos y gradas del teatro romano de Colonia Patricia Corduba. Y las piezas expuestas lucían en espacios amplios, bien iluminados, siguiendo los criterios de la moderna museología. Solo se echaba en falta que hubiera mucho más espacio, ya que lo expuesto era una mínima parte del catálogo del museo. En cualquier caso, se agradecía que Cultura hubiese echado la casa por la ventana, organizando esta magnífica exposición inaugural.
La visita fue muy entretenida, ya que Marian nos iba contando anécdotas y singularidades de las piezas. Como en otros museos, aprovechaba el final de cada explicación para tirar las fotos ya sin público, aunque entonces llegaba tarde a la siguiente parada. Las personas que participaron fueron muy pacientes conmigo, gesto que siempre he agradecido.
El nuevo Museo Arqueológico de Córdoba
Más paseos por Córdoba en 2011
Seguí en mis paseos fotografiando la Mezquita-Catedral, San Pedro y la Corredera. También visité lo que quedaba en Cercadilla del Palacio de Maximiano Hercúleo, que arrasaron en 1991 para construir la estación del AVE. Al final de la primera galería San Francisco y distintos rincones que iba retratando en mis paseos.
Córdoba, la luz de las culturas
Espectáculo de luz y sonido en el Alcázar de los Reyes Cristianos al que fuimos en abril.
Siguieron fotos de la iglesia de los Dolores, el Triunfo, una visita a Madinat al-Zahra, un paseo rápido por los patios, otra vez la Mezquita-Catedral y al final unas fotos de San Hipólito durante una boda.
La Casa Andalusí y la Capilla de San Bartolomé
La Casa Andalusí desde su apertura al público fue uno de mis rincones preferidos de Córdoba. Salma Farouki vino a Córdoba en los ochenta con su marido Roger Garaudy, invitados por Julio Anguita. Y se quedó para siempre, viviendo en esta casa que es un museo y una fuente de paz. Después visité la Capilla de San Bartolomé, otro de los tesoros de nuestra Córdoba. Terminan las fotos del año en la calle Cabezas, en la del Pañuelo y en el río, con dos nocturnos del puente y la catedral.