En las navidades de 1994 hicimos nuestro primer viaje a Canarias, a la isla de Tenerife. Fue una semana de vacaciones, descubriendo los encantos de la isla, con una temperatura estupenda.
Nos alojamos en el Puerto de la Cruz, en un apartamento muy confortable cerca del Botánico. Los dos primeros días los dedicamos a pasear y a visitar el Loro Parque.
Recorridos por Tenerife
El día 28 nos encaminamos en nuestro Seat Marbella al Parque Nacional del Teide, pero el cielo estaba muy cubierto y no pudimos subir al cráter. La mañana siguiente la pasamos en la Playa de las Teresitas y por la tarde recorrimos el área de Taganana. Y el viernes 30 de diciembre fuimos a La Orotava, a Icod de los Vinos —con su Drago Milenario —, y a Garachico; al atardecer paseamos tranquilamente por el Puerto de la Cruz.
Al Teide, ¡por fin!
El último día del año amaneció muy despejado, así que sin pensarlo dos veces volvimos al Teide. La subida en teleférico fue espectacular. A 3500 m el aire era frío y muy seco. No pudimos subir al cráter porque estaba cerrado; tampoco llevábamos el equipo adecuado… Al menos hicimos la foto de los Roques de García, el del billete de mil pesetas. Después bajamos al sur, a Playa de las Américas, que más que playa era un roquedal, y regresamos al apartamento para celebrar el fin de año.
El primer día de 1995 lo pasamos en las piscinas Martiánez hasta la hora del vuelo de regreso a Sevilla.